El dolor de espalda es uno de los enigmas anatómicos de la medicina. A menudo es difícil diagnosticar qué causa el dolor, aunque es tan común. Las pruebas de diagnóstico (como las MRI) pueden hacer que las cosas se vean aún más confusas. Las personas con muchos síntomas a veces tienen IRM de apariencia normal, mientras que algunas no experimentan ningún dolor, pero sus IRM sugieren un dolor de espalda terrible. Aproximadamente el 20 por ciento de las personas menores de 50 años tienen RMN o TC, evidencia de espinas degeneradas y anomalías en los discos. Lo mismo ocurre con al menos el 50 por ciento de las personas mayores de 50 años. Sin embargo, no todas estas personas tienen dolor, lo que dificulta el problema. Para muchas personas que padecen este trastorno, las deficiencias nutricionales promueven la inflamación y evitan que produzcan recubrimientos normales de los nervios de mielina. Incluso un poco de presión de un giro de un disco da como resultado un dolor en los nervios. Es bueno concentrarse en los poderes antiinflamatorios y en su capacidad para cubrir sus nervios con los ácidos grasos DHA-omega-3 y las vitaminas B apropiados. Los tratamientos quiroprácticos pueden ser efectivos para el dolor de espalda. La teoría pretende realinear las vértebras y establecer la movilidad normal de la columna vertebral. Esto a su vez alivia la irritación de los nervios y los músculos circundantes. Normalmente se requieren varias sesiones para aliviar el dolor. En estos días, existen técnicas más nuevas que hacen que la cirugía de espalda sea un procedimiento rápido. La cifoplastia y la vertebroplastia son procedimientos mínimamente invasivos para reparar una vértebra que se ha colapsado por cáncer u osteoporosis. La vértebra puede fortalecerse con una mezcla de cemento que se inserta a través de un pequeño corte de piel con herramientas especiales, bajo la guía de rayos X. Se realiza un procedimiento similar para quemar los nervios dolorosos dentro de los discos y reforzar las fibras de colágeno del disco. Sin embargo, las personas que sufren dolor de espalda con complicaciones neurológicas deben evitar la cirugía hasta que hayan trabajado con especialistas en rehabilitación o terapia del dolor durante algunos meses. Rara vez se necesita cirugía para el dolor lumbar, debido a otras terapias. Afortunadamente, no es lo importante determinar la causa del dolor lumbar. Concéntrese en lo que puede hacer para aliviar el dolor y evitar que lo incapacite. La clave es tener algún nivel de inteligencia postural. Sé consciente de tu postura y de tus músculos centrales. Entonces no solo puede apoyar su espalda, sino también prevenir otros daños estructurales, como las articulaciones.



Cómo quitar el dolor de espalda con 1 rutina, muy fácil y rápido (Mayo 2024).